OMG Sugar baby: Hoy les traigo un storytime, y esta historia es sobre, ya sabes, dinero, pero principalmente sobre sugar daddies. ¿Por dónde empiezo? Empecemos desde el inicio.

QuerÃa hacer esto porque siempre escucho a la gente decir que quieren un sugar daddy o que necesitan dinero pero no quieren trabajar. No importa lo que hagamos o quien nos de dinero siempre hay que tener algo que hacer.
Estaba trabajando en un almacén, y ya estaba cansada de trabajar en un horario de 9 a 7. Pensé en cómo ganar dinero sin tener que hacer tanto, conocÃa chicas que le daban cosas sin hacer nada… Decidà intentarlo, asà que empecé a buscar en Google, ya saben, Google es nuestra conciencia. Busqué cómo encontrar sugar daddies. Puedes encontrarlos en bares o en sitios web de sugar daddy. Encontré una web, me inscribÃ. Hice mi perfil en el sitio, pero no querÃa poner fotos mÃas, preferà hacerlo más anónimo. Y funcionó perfectamente, porque también ellos quieren privacidad.
En cuanto publiqué mi perfil, mi sugar daddy fue el primer mensaje que recibà y querÃa conocernos ese mismo dÃa. No estaba segura, pero hice un arreglo general de uñas y cabello y decidà ir a conocerlo. Nos encontramos en el estacionamiento de un supermercado, me subia a su auto..
Ser Sugar baby es una decisión personal , no todas queremos lo mismo
Antes del encuentro le habÃa dicho que tenÃa algunos problemas. y él me trajo un sobre con $200 dólares. Eso marcó un estándar para mÃ, y desde ahà empecé a esperar que todos tuvieran dinero en efectivo cuando los conociera. Hicimos un acuerdo para vernos cada dos semanas realmente fue muy rapido.
Nos encontrábamos y siempre nos veÃamos en lugares muy públicos, como Starbucks, en bares, en eventos públicos, en fiestas y cosas asÃ. Nos encontrábamos en esos lugares y, claro, déjenme decirles algo, chicas: especialmente si eres negra y tienes un «sugar daddy» blanco, la gente te va a mirar sin parar. Pero adivinen qué, ellos no pagan tus cuentas, asà que, ¿qué importa? SalÃamos a cenar y cosas asÃ, y sÃ, la gente miraba.


Entonces, estábamos saliendo y todo eso, y la «asignación» siempre era puntual. Él era realmente bueno con eso. Tengan en cuenta que él tenÃa como 60 y tantos años y solo querÃa compañÃa; llevaba como 15 años divorciado, y su ex esposa intentaba sacarle todo el dinero. El era ingeniero pero de los que ganan dinero, para dejarlo claro.
Asà que nos veÃamos, él me daba dinero, yo tomaba dinero. La «asignación» era de como 700 dólares cada mes, y algunos regalos lo cual sumaba unos 1000 dólares al mes. No me importa lo que diga la gente, 1000 dólares por pasar el rato con alguien…
Vamos, son 1000 dólares y ni siquiera hacÃa nada, solo pasaba tiempo con él, sin darle detalles sobre mi vida; le di un nombre falso, edad falsa, todo falso, ¿entiendes? Por 1000 dólares parecÃa actriz de pago. Pero luego, él empezó a desarrollar sentimientos, y ahà fue donde las cosas cambiaron, porque querÃa que fuera a eventos familiares, la playa, al mall y cosas asÃ. Entonces le dije que deberÃamos bajar un poco el ritmo, y justo en ese momento estaba empezando a tener otros «sugar daddies» y cosas asÃ, asà que su dinero ya no era tan relevante para mÃ. Pude haberle pedido más, pero como él tenÃa sentimientos, preferà pasar a otra cosa con otra gente.
En un punto, necesitaba dinero; estaba atrasada con el pago del carro, porque estaba de fiesta, llevando un estilo de vida muy alocado , porque tenia dinero sin un proposito. Entonces lo llamé llorando, dándole mi mejor actuación, y le dije que no tenÃa nada. Él respondió que me habÃa dado mucho dinero, pero aún asÃ, me ofreció ayuda. Entonces le pedà una suma ridÃcula, como 5 mil dólares, para alejarme de él.
Al final, aceptó prestarme 1 mil dólares, lo cual pagó mi deuda del carro y me compré algunas cosas. Luego, cuando él seguÃa insistiendo en verme, lo bloqueé. Sin embargo, unos meses después, cuando el dinero de otros «sugar daddies» se agotó, lo volvà a contactar. Inventé una historia, lloré y volvà a meterlo en mi bolsillo. Me mandó dinero mientras estaba en otro estado con otro chico, y después de eso, lo bloqueé otra vez.
Al final, aunque lo vi unas veces más, me di cuenta de que este tipo de cosas pueden volverse agotadoras, y requieren mucho de tu tiempo. El tiempo es algo que no se recupera, asà que tengan cuidado.
Otra cosa que aprendà es que, si tienes dinero y no tienes un propósito, de nada sirve. Por qué solo vas a malgastar el dinero, O vas a tener una vida alocada porque no sabes en qué usarlo.
